En esta semana sufrió nuestro
Chema un percance, que el mismo ha definido como un despegue fallido, ahora veremos las pruebas. Afortunadamente, todo quedó en un gran susto. Eso si, golpes por todo el cuerpo (chapa y pintura) y unos cuantos puntos por la cara que le darán un cierto
pedigrí. Imaginaros, si ya le
temíamos con sus formas de amedrentarnos, ahora con pinta de mafioso ...
Aquí os adjunto el documento gráfico.
Aquí inicia el despegue. Que juventud, que fogosidad, que hambre de victoria, que ... (esta es una foto anterior al
Drink-
tin, equipo que le ficho por sus buenas cualidades).
Así de maltrecho quedó. Vamos que tiene unas formas un poco raras de apearse de la bici.
Por cierto, pronto volverá a dar guerra.